Una Navidad diferente

En estos días bestiales ahora que comienza la temporada de caza navideña, donde el verdadero Belén es sustituido por un Papá Noel alucinógeno quiero felicitaros. Que tengáis todos una muy feliz Ranavidad, que en Nochebuena vuestro perro os hable y que durante la gran cena de Navidad, el solsticio de invierno os ilumine con su luz para el año nuevo.

Que celebréis con vuestros seres queridos igual que lo hicieron durante siglos numerosas culturas. Ese periodo en el que las noches se acortan y los días comienzan a ser más largos. Fiestas como el "Nacimiento del Sol invicto" de los romanos, el resurgir de Frey de las tribus nórdicas, dios del sol naciente, de la lluvia y la fertilidad o el advenimiento de Huitzilopochtli, dios mexica del sol y de la guerra son un ejemplo.

Por una Navidad diferente en familia y sin la fiebre consumista, como aquella que celebraban en la mítica serie 'Doctor en Alaska'. Donde el cuervo es el personaje central, considerado como el antepasado que trajo la luz del día a los hombres. Creó la tierra, las plantas, los animales y las personas, a las que enseñó a encender el fuego, a construir canoas y redes para pescar, así como a utilizar las pieles de los animales para fabricar sus vestimentas.