Cuenta una leyenda que los descendientes de los sefardíes que tuvieron que salir huyendo de sus casas aun guardan las llaves de sus ancestros. Llaves del siglo XV de las innumerables juderías de Sefarad. Igual que guardan estas llaves, atesoran los restos de la lengua sefardí, el ladino y el recuerdo de aquella rica sociedad de convivencia de las 3 culturas que coexistían en la península ibérica. En la imagen un arcón que contiene algunas llaves supuestamente de las casas que dejaron los judíos en el museo David Melul de Béjar.
Estas aparentemente sencillas llaves son muy peligrosas. Si te fijas detenidamente observaras que no son unas simples llaves. Todos los "dientes" son iguales, son las llamadas Llaves Bumping. En la década de 1970, cerrajeros daneses idearon una técnica capaz de abrir la gran mayoría de las cerraduras convencionales. Simplemente con un pequeño golpe en estas llaves se logra abrir la cerradura sin dejar ningún rastro.
Vídeo explicativo de el método Bumping:
Ya ves, un objeto sencillo puede encerrar una historia oculta tras un candado.
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