También existen logos de marcas que pueden llevar a la confusión. Así por ejemplo el logotipo de la marca de ropa A-Style, los japoneses no lo ven. Los curas tampoco. Y sin embargo ahí está, como un garabato sexual cifrado o una señal de tráfico rebelde. El logo de A-Style es un mensaje subliminal a prueba de retrógrados.
Vía Testosterona, El Pito Doble y Microsiervos
Y ahora, tras invadir Italia de forma contundente, amenaza con trepar a nuestros semáforos y empapelar los autobuses e instalarse en los escotes de nuestras novias y convertirse en la bandera de nuestras camisetas, gorras, pantalones… Un alarde de diseño italiano y un triunfo del Guerrilla Marketing.
Empezó siendo un diseño ingenioso que a su creador, Marco Bruns, se le ocurrió de forma casual a principios de los 90. La idea nació de la simple intuición de añadir el punto de la ‘i’ a dos extremidades de la letra ‘A’. Representa una pareja en plena relación sexual. “Es un mensaje border line en el límite entre la pura inocencia y la transgresión”, según asegura el propio Bruns.
+info: A-style, mucho más que un logo
Otro ejemplo es el logo para la web oficial de la oficina de comercio de Reino Unido, con un diseño, un tanto peculiar. Se basa en las letras de su sigla OGC, que puestas de forma vertical, en lugar de la posición horizontal original, parece un hombre masturbándose o como dicen en suramérica (descubierto gracias a este post) haciéndose la puñeta.
Vía Testosterona, El Pito Doble y Microsiervos
1 comentario:
Llevas toda la razón
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