27 de agosto de 2008

Los últimos lugares en la Tierra

El Planeta Tierra guarda aun lugares a los que el hombre todavía no ha llegado. En tiempos en los que los medios de comunicación nos acercan hasta los lugares más remotos, existen lugares inhóspitos que el hombre no ha visitado jamás. Para hallar éstos lugares, New Scientist se propuso descubrir: “los últimos lugares en la Tierra”. Montañas aún sin escalar, cuevas sin explorar, desiertos no cartografiados, tribus sin contacto con el mundo exterior e islas deshabitadas.
A continuación algunos de esos sitios de los que se detallan en el informe:

El último sitio por cartografiar.

De pie sobre la rambla de Muynak, en Uzbekistán, que fue uno de los más selectos sitios de vacaciones de la Unión Soviética, ya no se ven las olas romper. Todo lo que se ve es arena extendiéndose hasta el horizonte y más allá.

Comparación entre el estado del Mar de Aral en 1989 y el 12 de agosto de 2003.

Bienvenidos a lo que queda del Mar de Aral, que 40 años atrás cubría 68.000 kilómetros cuadrados. Ahora, la mayor parte ha desaparecido, como resultado del uso del agua de sus afluentes para el cultivo del algodón, que dejó 50.000 kilómetros de un desierto que aún no figura en los mapas.

Los satélites lo han fotografiado, pero pocos han explorado su suelo para confirmar esas imágenes satelitales. El resto es terra incognita .

El lugar más remoto del mundo.

Foto aérea de la isla de Bouvet.

Uno de los lugares más remotos es la isla de Bouvet. Desde su descubrimiento, en 1739, pocas personas han pisado su suelo, cubierto en gran parte por hielo, y desde 1971 es una reserva natural. El único vestigio humano es una estación de meteorología automática.

La tribu más aislada del mundo.

Los sentineleses son una de las últimas tribus aisladas del planeta. Ocultos en las islas Andaman, en el Índico. Un grupo de entre 50 y 200 personas que viven en una pequeña isla. Los sentineleses, fueron fotografiados tras el tsunami de diciembre de 2004 disparando flechas a un helicóptero que sobrevolaba su isla, se han resistido al contacto con el mundo exterior durante unos 60.000 años.

El último en ser descubierto.

Todavía existe tierra por descubrir, si uno sabe dónde buscar. A medida que los hielos polares se derriten por efecto del calentamiento terrestre, aparecen islas hasta entonces escondidas debajo de los hielos llamados eternos. La última en ser descubierta es Uunartoq Qeqertoq, cerca de la costa oriental de Groenlandia.

El último lugar donde ningún explorador ha pisado

Gangkhar Puensum.


Desde las islas polares hasta ciertos remotos desiertos, existen incontables áreas que aún hoy siguen siendo vírgenes. Que muchos de estos lugares no hayan sido visitados responde a una razón; Nadie quiere hacerlo. En el mundo de los exploradores, lo que interesa es conquistar sitios a los que los demás desearían haber llegado primero. En éste contexto, existen numerosas montañas que todavía no han sido escaladas y que muchos quisieran escalar. En el tope de la lista está Gangkhar Puensum, la montaña más alta de Bután, con 7541 metros. Los tres intentos de alcanzar su cima han fracasado y, desde 1994, Bután prohíbe escalar montañas de más de 6000 m por respeto a creencias religiosas.

Las profundidades marinas son sin duda alguna el mayor desafío.
Cueva Voronya.

Existen profundidades por ser exploradas. La cueva Voronya en Abjasia, Georgia, es, con 2170 metros, la más profunda del mundo. En enero de 2007, una expedición descubrió la entrada a un nuevo pasaje que agrega 30 metros que se encuentran bajo el agua.

El último lugar donde oír hablar la lengua más extraña.

La muerte de toda lengua es una tragedia, pero algunas son más graves que otras. Un puñado de lenguas en peligro son los últimos refugios de raras formas de lenguaje que, una vez desaparecidas, se habrán ido para siempre. Una es el tofa, hablado por unos pocos nómadas de las montañas de Sayan en Siberia. En la década del 50, el gobierno soviético los obligó a aprender ruso y a abandonar su forma de vida tradicional. Hoy, sólo 25 personas hablan tofa, lengua que posee un sufijo - sig - que significa “huele a” , al que se le pueden adjuntar palabras como ivi “reno”, para describir a alguien que huele a reno. Ninguna otra lengua posee sufijos de este tipo.

El último lugar sin vida.

Cuando los biólogos buscan vida, suelen encontrarla. Hay dos notables excepciones: ciertas extensiones de la Antártida y Groenlandia, lo que no resulta para nada sorprendente. Pero existe otro más misterioso: una zona llamada Yungay, en el corazón del desierto de Atacama, Chile: la única extensión de tierra seca que parece no albergar vida en su superficie.

El último sitio por donde se pasearon los dinosaurios.

Sabemos que los dinosaurios se extinguieron hace 65 millones de años, como resultado del impacto de un meteorito de 10 kilómetros de ancho, sin embargo, unos pocos paleontólogos insisten en que un puñado de especies sobrevivieron al desastre por unos pocos millones de años. En Montana, Estados Unidos, se han desenterrado restos de dentadura de dinosaurio medio millón de años después de la extinción. Pero la última prueba de estos dinosaurios Lázaro son pisadas de reptiles herbívoros que se pasearon por Ludlow, Colorado (EE.UU.).

El último lugar en donde la gente escribe con pictogramas.

Hace 8500 años, los habitantes de lo que hoy es China comenzaron a escribir con símbolos. Primero usaron dibujos para representar palabras e ideas. Ese tipo de escritura ha caído en desuso y fue suplantada por sistemas de escritura más abstractos como el que usted está leyendo, con sólo una excepción. En unas montañas del sudoeste de China, un cada vez menor número de monjes que practican una religión animista todavía escribe y lee pictogramas. El sistema de escritura se llama dongba y ha sido usado durante 1000 años para registrar y guiar la tradición religiosa de los naxi. Contienen unos 2000 pictogramas, y el que representa la palabra “robo” es un ave que cae en las garras de un águila.

Durante la revolución cultural china, el dongba fue prohibido y miles de manuscritos fueron destruidos. Hoy, menos de 60 monjes saben escribir y leer el dongba, aunque actualmente hay esfuerzos gubernamentales por rescatarlo.

El último lugar en emerger de las aguas.

Home Reef.

El 9 de agosto de 2006, unos veleros que navegaban alrededor de Tonga fueron testigos de una erupción volcánica submarina del Home Reef, al sur de la isla Late. Tres días después, la tripulación del velero noruego Maikenm pudo observar una isla que no figuraba en las cartas náuticas.


Fuente: La Tierra guarda lugares que aún el hombre no pisó

2 comentarios:

matutino dijo...

como siempre, una entrada muy interesante

Anónimo dijo...

'Los sentineleses son una de las últimas tribus aisladas del planeta ... se han resistido al contacto con el mundo exterior durante unos 60.000 años'.

¿Podrías probar semejante afirmación?

Por supuesto que no. Nadie podría.

Es más, casi estaría seguro de que tal afirmación es errónea y que durante todos esos miles de años, los sentineleses han tenido contacto con el exterior en un momento u otro.

¿Porqué nos gustan tanto estos titulares que nada tienen de científico ni de verdad?

Sololon.